Sé que esta entrada hubiera tenido que escribirse antes. A veces, desafortunadamente, esto no es posible. Sin embargo, quiero (a pesar de eso, repito) comentar un acto al que pude asistir ayer y que, si alguna vez tenéis oportunidad, no dejéis pasar por alto.
Se trataba de Yllana Teatro, que representó en el Centro de Congresos de Barbastro el espectáculo titulado: Pagagnini.
En un mismo plano se reúnen el humor y la locura de Yllana, y la música a través del virtuosismo de cuatro grandes músicos, capitaneados por el maestro Ara Malikian. Se pretende “divertir con el humor gestual, emocionar con la música y burlarse de la solemnidad que siempre rodea el mundo de la música clásica”, explica el gran violinista.
En casi hora y media trepidante se repasan algunos momentos cumbre de la música culta fusionados con otros estilos musicales, consiguiendo un divertido y sorprendente “des-concierto”, con el que se pretende reinventar la manera de concebir un recital.
En casi hora y media trepidante se repasan algunos momentos cumbre de la música culta fusionados con otros estilos musicales, consiguiendo un divertido y sorprendente “des-concierto”, con el que se pretende reinventar la manera de concebir un recital.
Tres violines y un chelo : Ara Malikian, Eduardo Ortega, Thomas Potiron y Gartxot, y una puesta en escena que ha obtenido exitosos premios internacinales.
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