Soledad y caridad,
eran todas amabilidad,
bondad y jovialidad.
Esta Navidad
sus sueños se hicieron realidad
y obtuvieron la nacionalidad.
Qué graciosidad,
qué solemnidad.
La hermana de Ana
tiene una rana,
se llama Mariana
y monta jarana;
es un poco mundana.
Esa mítica, paleolítica,
está un poco raquítica,
se va a quedar sifilítica
y hasta paralítica.
Es amable, afable,
pero se siente culpable,
le clavó el sable
el muy desdeñable;
es un acto deplorable
y nada honorable.
Él se siente contento;
si le cuento un cuento
ya no está hambriento
ni somnoliento,
solo atento
a cada fragmento
de este cuento.
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